Así era el título con el cual pretendía nombrar a mi entrada de ayer por la tarde. Una entrada sin duda reveladora, sincera, abierta, una entrada que hablaba de mí, que seguro hablaba de él, y que quizá hablaba de ti. Y en la entrada, en la que el destino ocupaba un lugar preferente, se encargó de dejarme sin conexión a internet, y por tanto a mí sin revelar, a él sin ser, y a ti quizá sin saber.
"Va pasando el tiempo bajo el cielo sin estrellas de Madrid, pero hoy no encuentro la ilusión que me quemaba dentro, nada más llegar a esta ciudad que nos devora, dime dónde estás que te quiero ver y dejar pasar esa mala hora."
Y así nos quedaremos. Yo sin expresar, él con las dudas, y quizá tú, con las ganas.
Quiero vivir a mí manera, eso sí, contigo.
Alomejor son solo las horas, sí, seguramente. Pero te necesito, lo necesito.
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