lunes, 16 de noviembre de 2009

Fracaso en mis 20 años de vida.

No sé porque ahora me ha dado por saltear las actualizaciones. Hacer una de carácter político, y otra de carácter personal, una de política y otra personal. He meditado muy mucho tener espacios diferentes, uno donde dé rienda suelta a mis sentimientos, rayadas y ocurrencias, y otra donde exponga mis puntos de vista sobre los diferentes temas de actualidad, y analice los acontecimientos políticos que me vengan en gana, pero finalmente me he decantado por tener un solo blog, por que al fin y al cabo, tengo una sola vida, y en esa vida se entremezclan precisamente las rayadas personales con las vivencias políticas. Va todo junto, fundido, como el queso en mis sandwiches mixtos.

Son las 5.56 y estaba echando un ojo a la actualización anterior; "fracaso de la socialdemocracia" lo titulaba, y me ha venido a la mente el título de esta nueva actualización; "fracaso en mis veinte años de vida". En el fondo, y como socialista convencido, el fracaso de este modelo, es en parte un fracaso personal. Uno, otro más de tantos.

Estoy profundamente cansado, hastiado de esta espera. No aguanto más. No me aguanto más, y como no me aguanto más, necesito alguien que aguante un poco de mí, que me aguante un poco, a cambio, yo prometo guantarle un poco a él. Me cansa hacer lo que siempre me gusta, porque si siempre tienes y haces lo que te gusta, te acabas cansando, por eso necesito hacer lo que te guste a ti, para cambiar y no cansarme, pero eso sí, también tú tendrás que hacer algo que me guste a mí. Me cansa tener más amigos, y solo amigos. Necesito tener un gran amigo, sí un mejor amigo, que me lo dé todo, que me dé también esa parte que mis otros amigos no me pueden dar, esa necesidad humana tan conocida como la palabra sexo, lo necesito. Necesito que no vean en mí una simple cara bonita, si no una persona con la que compartir, compartir. Pero a cambio necesito que los días en los que se agota la semana veas 24 sombras sobre una alfombra verde.

Lo necesito:
Que me abracen.
Que con sola una mirada nos expliquemos.
Que hablen.
Que hablemos.
Que nos perdamos.
Que nadie nos entienda.
Que nadie lo sepa.
Que todos lo conozcan.
Que aplaudamos.
Que gritemos.
Que ríamos.
Que lloremos.
Que discutamos.
Que cantemos, que cantemos.

Conocerlos, vivirlos, que te conozcan, que te vivan, que los vivas.
Quiero comer, y que me coman.

"Llena, pues, de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena noche
del alma para siempre oscura."

Federico García Lorca. "El poeta pide a su amor que le escriba." Sonetos del amor oscuro.

2 comentarios: