miércoles, 29 de abril de 2009

De egoísmo nada, monada.

El ser humano no es egoísta por naturaleza. Creo que esta tajante afirmación es necesaria para poder empezar a luchar contra injusticias varias. Que fácil lo hacemos todo ¿no? ¿Cuántas veces habremos escuchado eso de, "él socialismo no es posible porque el ser humano es egoísta por naturaleza"? Así solucionamos las cosas muy rápidamente, ¿cómo vamos a luchar contra la naturaleza? Que yo sepa aún no se ha demostrado que se lleve en los genes eso de ser egoísta, igual que no se ha demostrado que se lleve marcada genéticamente la ideología. El egoísmo, al igual que la ideología, se forma. Y dependiendo del contexto social donde te formes, serás presumiblemente de una ideología o de otra. Por ejemplo, si has tenido en casa una educación más conservadora, o si en tu escala de valores das preferencia al orden antes que a la libertad, presumiblemente seas de derechas, pero lo dicho, no se nace siendo de derechas, al igual que no se nace siendo egoísta.

Sí, yo soy egoísta, y tú también, y quizás todo el mundo que conozcas ¡y es muy lógico! todos nos hemos socializado en un contexto en el que nuestra educación ha ido encaminada a ser los mejores, los que más tengamos, a plastar al rival, a competir si es necesario hasta las últimas consecuencias con él. Pero imagínate que desde pequeño nos hubiesen obligado a compartir nuestra paga con nuestros amigos. Eso sería lo normal, la conducta aprendida, me van a dar la paga, pero la tengo que compartir con mis amigos. Esto pasa con los africanos que venden discos, lo que ganan luego lo ponen en común para que repercuta en el bien común de todos, es decir, cada uno no gana lo suyo, sino que todos ganan lo de todos. ¿Qué pasa pues? Por las circunstancias, por su contexto social, esta gente no ha desarrollado su egoismo.

Otro ejemplo de no egoismo que se da en el hombre, es, por ejemplo, a la hora de votar. Mucha gente vota por esa ideologia adquirida, y no pensando en sus propios intereses. Vease, por ejemplo, los jovenes que votan a un partido que le recorta las becas, en detrimento de otro que se las subiria.

Y ahora dime si nunca has querido dar la vida por otra persona.

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